Ahí en donde Midas y Diotima se encuentran
dulce néctar de amores abortados
unidos por un borde del horizonte
encuentran tras una sombra de alcatraz
una vida con otra
distantes en kilómetros
ausentes del tiempo
cerca de la piel
cuando el mundo cae en sus ensueños
el hado los toca
(quizá ha sido escrito
y el oráculo lo ha dicho
tras la espalda del infierno).
Ahí donde se encuentran en un mundo
que une un limbo y otro
parece que las piedras vuelan
mientras la tierra se vuelve tartamuda.
Oblicuo el silencio
un espacio y otro
un vacío que se acerca
entero y lleno de seducciones.
Miran sus ojos que no le miran
{por el cosmos que habita entre ambos}
lo que no dice lo escucha.
En ella se estremece el ansía
ausente en catacumbas.
En él cohabita una nube de dudas
pero su corazón no para
y la mente rueda tras su imagen
Midas y Diotima
un lugar en la nada.
Él es ámbar
ella es vidente
perpendicular es su historia.
No hay más espacio, tierra y tiempo
la geografía de sus almas
se extiende
una biografía de luces
un cándido desperar
una luz
una puerta
un corredor
después
al fondo
oscuridad...
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